Exactamente hoy, hace doce años, dimos el salto de la radio a esa cosa que ya llevaba un tiempo, poco, y que empezaba a situarse como un medio de difusión con cierto futuro.?
Internet en 1999 aún sonaba a chino en ciertos sectores, pero era indudable su empuje. Nosotros creímos en un primer momento de su importancia y nos volcamos a sacar adelante un proyecto que, con el paso de los años, ha ido cambiando de imagen y de contenidos unas cuantas veces.
Con A Todo Motor cambiamos el micrófono por el teclado y desde luego hay muchas y significativas diferencias en el modo y manera de buscar y plasmar los contenidos y, paralelamente, nos adentramos en el mundo de la fotografía. En un primer momento con los carretes de toda la vida y muy pronto, con la llegada de la era digital, también nos atrevimos con la evolución, que por aquellas fechas era inminente.
Dejamos atrás el narrar de viva voz lo que en el mundo del motor canario ocurría, para hacerlo en un medio completamente diferente y nuevo. Y a fecha de hoy, a pesar de tener claro que el mundo de la radio tiene un encanto insustituible, no nos arrepentimos del cambio realizado.
Actualmente disponemos en nuestra web de un banco de datos de los últimos doce años, que es consulta obligada de muchos de nuestros asiduos visitantes, con la sana intención, a partir de ahora, de ir poco a poco adentrándonos en las hemerotecas para seguir ampliando los años de información pasados, ya que los resultados los narrábamos, por lo que quedaban en las ondas hertzianas.
Internet sin duda nos ha enseñado muchos entresijos y la red nos ha permitido seguir en contacto con la afición a la gasolina, con la que contamos desde mucho tiempo atrás, a la vez que nos ha permitido seguir aportando cosas nuevas a la hora de ofrecer la información y seguir llenando nuestra experiencia con modos y maneras de hacer las cosas, que luego otros también han realizado, pero ya nadie nos quita el haber sido los primeros.
Doce años. Tiempo más que suficiente para saber lo que A Todo Motor necesita y a dónde quiere llegar. Pero no pedimos mucho. Sólo el eterno agradecimiento a todos los asiduos lectores de la red que nos tienen en sus mentes y que, con más o menos frecuencia, nos visitan. Las expectativas están sobradamente conseguidas. Nunca pensamos llegar a donde hemos llegado y, como lo complicado es mantenerse, ese es nuestro reto. Seguir esforzándoos para seguir creciendo, con el alimento necesario que nos brindan quienes creen en nosotros.
En el camino quedan las lógicas críticas de quienes piensan de diferente manera de hacer las cosas, pero desde la seriedad y la honestidad de cuantos hacemos esto, tengan la absoluta tranquilidad de saber que seguimos en la misma senda, para que la información que ofrecemos sea la que ustedes demandan. Quizás no esté todo, pero allí donde acudimos, intentamos ofrecer lo que pueda interesar. Ni más, ni menos.
Dicho la anterior, sólo nos queda una cosa: sencillamente, gracias.
Internet en 1999 aún sonaba a chino en ciertos sectores, pero era indudable su empuje. Nosotros creímos en un primer momento de su importancia y nos volcamos a sacar adelante un proyecto que, con el paso de los años, ha ido cambiando de imagen y de contenidos unas cuantas veces.
Con A Todo Motor cambiamos el micrófono por el teclado y desde luego hay muchas y significativas diferencias en el modo y manera de buscar y plasmar los contenidos y, paralelamente, nos adentramos en el mundo de la fotografía. En un primer momento con los carretes de toda la vida y muy pronto, con la llegada de la era digital, también nos atrevimos con la evolución, que por aquellas fechas era inminente.
Dejamos atrás el narrar de viva voz lo que en el mundo del motor canario ocurría, para hacerlo en un medio completamente diferente y nuevo. Y a fecha de hoy, a pesar de tener claro que el mundo de la radio tiene un encanto insustituible, no nos arrepentimos del cambio realizado.
Actualmente disponemos en nuestra web de un banco de datos de los últimos doce años, que es consulta obligada de muchos de nuestros asiduos visitantes, con la sana intención, a partir de ahora, de ir poco a poco adentrándonos en las hemerotecas para seguir ampliando los años de información pasados, ya que los resultados los narrábamos, por lo que quedaban en las ondas hertzianas.
Internet sin duda nos ha enseñado muchos entresijos y la red nos ha permitido seguir en contacto con la afición a la gasolina, con la que contamos desde mucho tiempo atrás, a la vez que nos ha permitido seguir aportando cosas nuevas a la hora de ofrecer la información y seguir llenando nuestra experiencia con modos y maneras de hacer las cosas, que luego otros también han realizado, pero ya nadie nos quita el haber sido los primeros.
Doce años. Tiempo más que suficiente para saber lo que A Todo Motor necesita y a dónde quiere llegar. Pero no pedimos mucho. Sólo el eterno agradecimiento a todos los asiduos lectores de la red que nos tienen en sus mentes y que, con más o menos frecuencia, nos visitan. Las expectativas están sobradamente conseguidas. Nunca pensamos llegar a donde hemos llegado y, como lo complicado es mantenerse, ese es nuestro reto. Seguir esforzándoos para seguir creciendo, con el alimento necesario que nos brindan quienes creen en nosotros.
En el camino quedan las lógicas críticas de quienes piensan de diferente manera de hacer las cosas, pero desde la seriedad y la honestidad de cuantos hacemos esto, tengan la absoluta tranquilidad de saber que seguimos en la misma senda, para que la información que ofrecemos sea la que ustedes demandan. Quizás no esté todo, pero allí donde acudimos, intentamos ofrecer lo que pueda interesar. Ni más, ni menos.
Dicho la anterior, sólo nos queda una cosa: sencillamente, gracias.
