Eduard Pons vuelve a la carga este fin de semana en la Baja España Aragón, que se disputará del 26 al 28 de julio y será la tercera prueba puntuable para la Copa del Mundo FIA de Bajas. Tras su increíble actuación en la Baja Grecia el pasado mes de mayo, donde se impuso tanto en scratch como en la categoría Challenger –anterior T3–, su mejor resultado hasta la fecha junto a Jaume Betriu, la dupla ilerdense se pondrá de nuevo a los mandos del Taurus T3 Max de la estructura BBR Motorsport para demostrar su potencial y continuar escalando en la clasificación del campeonato, donde ocupa el cuarto lugar, a tan solo dos puntos del tercero.

“Venimos de lograr un triunfo y esto nos coloca en una buena posición, con seis carreras de la Copa del Mundo todavía por delante. Será una prueba complicada porque participan pilotos muy rápidos y con una gran experiencia, pero intentaremos estar entre los primeros de los T3”, destaca el de Lleida.

El polvo, las piedras y el calor extremo serán los protagonistas de la cita aragonesa. Pons ya sabe lo que es pilotar en este terreno, pues esta será su quinta participación –la cuarta consecutiva–. Por este motivo, tiene muy claro cómo tiene que afrontar la prueba.“El objetivo es conseguir bastantes puntos para seguir con opciones de ganar la Copa del Mundo en la categoría Challenger y comprobar el rendimiento del vehículo con miras al Rally Dakar 2025. Para ello, tenemos que hacer una correcta prólogo, ya que es clave para el resto de la carrera. Salir detrás prácticamente te deja fuera, en cambio, si lo hacemos en una posición en la que podamos ir a una buena velocidad, podremos ir avanzando”, asegura.

En su 40 aniversario, la Baja Aragón ha batido su récord de inscritos con más de 270 equipos, de los que 84 serán coches, que deberán atravesar 35 municipios de la comarca del Jiloca y de Teruel. El pistoletazo de salida será este viernes 26 de julio por la tarde con la etapa prólogo, de escasos 7 kilómetros que se disputará en Teruel, el centro neurálgico de la prueba. El sábado será todo un reto, con un total de 355 kilómetros cronometrados divididos en dos exigentes tramos. La segunda etapa, que se celebrará el domingo, constará de una única especial de 160 km contra el crono.Después de haber tenido una toma de contacto con el vehículo en el shakedown, Eduard Pons reconoce empezar con buen feeling: “Hemos realizado unos 50 kilómetros de prueba y, tras hacer algunas variaciones en el setup del coche, estamos a gusto con el funcionamiento, lo que nos da ánimos para afrontar este desafío”, concluye el piloto.