Los prototipos del Range Rover eléctrico se encuentran actualmente en uno de los lugares con el clima más implacable del mundo para someterse a las pruebas más intensas de la historia de Range Rover.
Los Emiratos Árabes Unidos se convierten en el escenario de una evaluación abrasadora en el desierto como parte del duro proceso de desarrollo del primer Range Rover totalmente eléctrico. El rendimiento y la eficiencia del vehículo se someten a un drástico desafío para garantizar que todo el sistema de propulsión controla la temperatura con fiabilidad y su construcción optimiza su vida útil y su autonomía.
Range Rover está poniendo duramente a prueba su sistema de gestión térmica más novedoso e inteligente en situaciones con temperaturas de 50° C y hasta un 90 % de humedad. En el entorno de pruebas que pasan todos los vehículos Range Rover, no hay lugar mejor para poner al límite la climatización. Desde las dinámicas subidas del desierto hasta los ciclos urbanos bajo el sol abrasador, ningún escenario se queda sin estudiar para conseguir la máxima comodidad de los clientes en el habitáculo y las mejores prestaciones del vehículo.
Thomas Müller, Executive Director de Product Engineering, afirmó: “El clima cálido es uno de los mayores retos para cualquier vehículo eléctrico con batería, ya que tiene que enfriar el habitáculo al mismo tiempo que optimizar el rendimiento de la batería. El problema añadido de conducir sobre arena supone que sea necesario controlar bien el par a baja velocidad, por lo que hemos desarrollado unos sistemas de gestión térmica y control de tracción que trabajan en armonía para garantizar que la potencia no se vea comprometida. En estas condiciones climáticas, al subir de forma reiterada el equivalente a 100 metros sobre arena fina, el Range Rover eléctrico obtuvo el mismo rendimiento en las pruebas que las versiones de combustión interna e incluso mejoró sus resultados gracias a estos nuevos sistemas”.
El Range Rover eléctrico se nutre de más de 50 años de innovación pionera para mantener el aplomo y el confort sobre cualquier superficie. Este ciclo de pruebas de durabilidad y resistencia confirma las credenciales de Range Rover como el mejor vehículo para embarcarse en cualquier aventura, también en su era eléctrica. El sistema de propulsión eléctrica inteligente y el avanzado Terrain Response de Range Rover ofrecen una experiencia fluida más allá de las metrópolis de Dubái, adentrándose sin miedo en el desierto gracias a la confianza que inspiran sus prestaciones.
El nuevo sistema de gestión inteligente de par del Range Rover eléctrico distribuye la gestión del deslizamiento de las ruedas a cada unidad de control de tracción eléctrica, lo que reduce el tiempo de reacción del par en cada rueda de unos 100 milisegundos a apenas 1 milisegundo para mejorar el control de tracción al conducir sobre arena fina.
En esta importante etapa del desarrollo del vehículo, el Range Rover eléctrico está ofreciendo una imagen espectacular. Continúan los preparativos para pulir y trabajar este culmen del lujo de Range Rover con la vista puesta en abrir reservas para 2025.
Los Emiratos Árabes Unidos se convierten en el escenario de una evaluación abrasadora en el desierto como parte del duro proceso de desarrollo del primer Range Rover totalmente eléctrico. El rendimiento y la eficiencia del vehículo se someten a un drástico desafío para garantizar que todo el sistema de propulsión controla la temperatura con fiabilidad y su construcción optimiza su vida útil y su autonomía.
Range Rover está poniendo duramente a prueba su sistema de gestión térmica más novedoso e inteligente en situaciones con temperaturas de 50° C y hasta un 90 % de humedad. En el entorno de pruebas que pasan todos los vehículos Range Rover, no hay lugar mejor para poner al límite la climatización. Desde las dinámicas subidas del desierto hasta los ciclos urbanos bajo el sol abrasador, ningún escenario se queda sin estudiar para conseguir la máxima comodidad de los clientes en el habitáculo y las mejores prestaciones del vehículo.
El Range Rover eléctrico ofrece una eficiencia impresionante que supera los resultados en pruebas térmicas sobre arena de todos los Range Rover anteriores. A pesar de todas las limitaciones, se mantuvo un rendimiento térmico excepcional de forma constante durante todo el intenso y largo trayecto por el desierto.
Thomas Müller, Executive Director de Product Engineering, afirmó: “El clima cálido es uno de los mayores retos para cualquier vehículo eléctrico con batería, ya que tiene que enfriar el habitáculo al mismo tiempo que optimizar el rendimiento de la batería. El problema añadido de conducir sobre arena supone que sea necesario controlar bien el par a baja velocidad, por lo que hemos desarrollado unos sistemas de gestión térmica y control de tracción que trabajan en armonía para garantizar que la potencia no se vea comprometida. En estas condiciones climáticas, al subir de forma reiterada el equivalente a 100 metros sobre arena fina, el Range Rover eléctrico obtuvo el mismo rendimiento en las pruebas que las versiones de combustión interna e incluso mejoró sus resultados gracias a estos nuevos sistemas”.
El Range Rover eléctrico se nutre de más de 50 años de innovación pionera para mantener el aplomo y el confort sobre cualquier superficie. Este ciclo de pruebas de durabilidad y resistencia confirma las credenciales de Range Rover como el mejor vehículo para embarcarse en cualquier aventura, también en su era eléctrica. El sistema de propulsión eléctrica inteligente y el avanzado Terrain Response de Range Rover ofrecen una experiencia fluida más allá de las metrópolis de Dubái, adentrándose sin miedo en el desierto gracias a la confianza que inspiran sus prestaciones.
La equilibrada distribución del peso y el sistema de suspensión avanzado logran mantener el control y la estabilidad con facilidad por la arena para moverse con un aplomo inigualable. Los robustos sistemas de tracción ofrecen un par instantáneo para conseguir una rápida aceleración, una gran respuesta y una conducción refinada incluso sobre las irregulares formaciones de arena.
El nuevo sistema de gestión inteligente de par del Range Rover eléctrico distribuye la gestión del deslizamiento de las ruedas a cada unidad de control de tracción eléctrica, lo que reduce el tiempo de reacción del par en cada rueda de unos 100 milisegundos a apenas 1 milisegundo para mejorar el control de tracción al conducir sobre arena fina.
En pleno corazón del desierto de Al Badayer de Sarja, la gran duna roja se erige entre el resto de dunas color azafrán. Los 90 metros de altura de esta formación natural constituyen la subida de montaña más importante de Dubái. Para pasar a la siguiente fase, todos los vehículos Range Rover tuvieron que completar la subida cinco veces sin comprometer en absoluto su rendimiento. El Range Rover eléctrico superó la prueba con creces.
En esta importante etapa del desarrollo del vehículo, el Range Rover eléctrico está ofreciendo una imagen espectacular. Continúan los preparativos para pulir y trabajar este culmen del lujo de Range Rover con la vista puesta en abrir reservas para 2025.