Mal día para Carlos Sainz y Lucas Cruz (Ford Raptor T1+) en la segunda y larga etapa de cerca de mil kilómetros cronometrados, que se disputa a lo largo de dos días. Después de un buen inicio de jornada, en una duna cortada, sufrieron un vuelco que dejó bastante dañado el Ford. Tras recibir la ayuda de su compañero de equipo Mitchell Guthrie, lograron reanudar la marcha.
Con varios desperfectos en la carrocería, la visibilidad se vio reducida debido a la rotura del cristal delantero y el motor comenzó a sobrecalentarse. A pesar de las dificultades, consiguieron llegar al campamento donde pasarán la noche, perdiendo casi una hora, para continuar la etapa al día siguiente por la mañana.
Con varios desperfectos en la carrocería, la visibilidad se vio reducida debido a la rotura del cristal delantero y el motor comenzó a sobrecalentarse. A pesar de las dificultades, consiguieron llegar al campamento donde pasarán la noche, perdiendo casi una hora, para continuar la etapa al día siguiente por la mañana.
Carlos Sainz: "Hoy ha sido una etapa bastante complicada. Después de volcar en una duna cortada, pudimos continuar gracias a la ayuda de nuestro compañero Mitchell. Pero luego tuvimos más problemas, el coche se calentaba, no veíamos bien por el cristal roto y pinchamos. El día fue de mal en peor".