
El Rali do Cocido abrió el telón del Campeonato Gallego de Rallyes, donde nuevamente la Copa Top Ten Pirelli fue una de las grandes protagonistas de un fin de semana pasado por agua.
En la Copa Top Ten Pirelli "B", los vehículos de cuatro ruedas motrices partían como favoritos, con Tino Iglesias marcando el primer scratch en un difícil O Couto a bordo del Fiesta N5, para después ser superado por el Mitsubishi de Antonio Fernández, que terminaba la matinal con 12 segundos de ventaja sobre el piloto de Ribadumia, 29 sobre Abel Pampillón y 44 respecto al primer dos ruedas motrices, Daniel Montoto.
Por la tarde, Abel Pampillón se lanzó al ataque encadenando un scratch tras otro para remontar los dos escalones del podio y hacerse con el triunfo junto a su copiloto José Lage. Fernández no pudo defenderse como hubiera querido debido a problemas de encendido en su vehículo, que le hicieron ceder mucho tiempo en los compases finales. Peor le fueron las cosas a Tino Iglesias, que volcaba en el último tramo, en la misma curva donde posteriormente le imitaba Diego Rodríguez, que estaba realizando un rallye espectacular a bordo de su Seat Ibiza habiéndolo situado en la cuarta plaza tras el abandono de Daniel Montoto por avería. Tras estos acontecimientos, el podio lo culminaba Marcos Díaz al volante de un BMW Compact.
En cuanto a la Copa Top Ten Pirelli "C", muchísimo nivel de inscritos se dio cita en la comarca del Deza, destacando el actual Campeón de España de Rallyes de Asfalto, Jorge Cagiao, quien tomó las riendas del liderato con dos scratchs, antes de sufrir un accidente en la tercera especial. Fue entonces cuando Manuel Souto recogió el testigo, dominando con su Peugeot 208 R2 en unas condiciones donde se encontraba muy cómodo, y a pesar de algún susto, se hacía con la primera victoria de la temporada acompañado por Raquel Rodríguez.
Por detrás, después del abandono de Cagiao, el vigente campeón Álvaro Castro parecía el Clio más rápido de la monomarca, pero se vería afectado por una penalización de un minuto que le relegaría por detrás de Iván Vázquez (el más regular de los Clio) y Pablo Sánchez al final de la prueba. Guillermo Martínez completaba el top 5 estrenándose, al igual que muchos otros, con el vehículo del rombo. En cuanto a los becados, el campeón de la Copa Pirelli AMF, Álvaro Pérez, sufría un ligero toque en la primera especial que le hacía ceder bastante terreno, remontando hasta la séptima plaza con un muy buen ritmo durante la tarde; Yago Martínez lograba la octava plaza en un prometedor debut con un vehículo muy superior al Dacia Sandero que pilotaba el pasado año; la cara amarga de la jornada fue la del campeón del Volante FGA, Marco Lorenzo, que rompía una rótula de dirección y no pudo completar la prueba de casa para él.
En la Copa Top Ten Pirelli "B", los vehículos de cuatro ruedas motrices partían como favoritos, con Tino Iglesias marcando el primer scratch en un difícil O Couto a bordo del Fiesta N5, para después ser superado por el Mitsubishi de Antonio Fernández, que terminaba la matinal con 12 segundos de ventaja sobre el piloto de Ribadumia, 29 sobre Abel Pampillón y 44 respecto al primer dos ruedas motrices, Daniel Montoto.
Por la tarde, Abel Pampillón se lanzó al ataque encadenando un scratch tras otro para remontar los dos escalones del podio y hacerse con el triunfo junto a su copiloto José Lage. Fernández no pudo defenderse como hubiera querido debido a problemas de encendido en su vehículo, que le hicieron ceder mucho tiempo en los compases finales. Peor le fueron las cosas a Tino Iglesias, que volcaba en el último tramo, en la misma curva donde posteriormente le imitaba Diego Rodríguez, que estaba realizando un rallye espectacular a bordo de su Seat Ibiza habiéndolo situado en la cuarta plaza tras el abandono de Daniel Montoto por avería. Tras estos acontecimientos, el podio lo culminaba Marcos Díaz al volante de un BMW Compact.

Por detrás, después del abandono de Cagiao, el vigente campeón Álvaro Castro parecía el Clio más rápido de la monomarca, pero se vería afectado por una penalización de un minuto que le relegaría por detrás de Iván Vázquez (el más regular de los Clio) y Pablo Sánchez al final de la prueba. Guillermo Martínez completaba el top 5 estrenándose, al igual que muchos otros, con el vehículo del rombo. En cuanto a los becados, el campeón de la Copa Pirelli AMF, Álvaro Pérez, sufría un ligero toque en la primera especial que le hacía ceder bastante terreno, remontando hasta la séptima plaza con un muy buen ritmo durante la tarde; Yago Martínez lograba la octava plaza en un prometedor debut con un vehículo muy superior al Dacia Sandero que pilotaba el pasado año; la cara amarga de la jornada fue la del campeón del Volante FGA, Marco Lorenzo, que rompía una rótula de dirección y no pudo completar la prueba de casa para él.