No hay palabras suficientes para describir lo que hemos vivido esta semana en Gran Canaria. Desde antes de que arrancara el rally, teníamos muy claro que nos jugábamos mucho. No solo era una cita clave del WRC, era también una oportunidad única para demostrar que aquí sabemos hacer las cosas bien, que nuestra afición está a la altura de las mejores del mundo. Por eso desde la propia Organización y A Todo Motor fuimos directos, sin rodeos, lanzando mensajes muy claros de seguridad en artículos como “El WRC llega a Canarias: que se celebre, depende de todos” y “Derribando mitos y rumores del Rally Islas Canarias WRC 2025”. Queríamos que todo el mundo entendiera que el éxito de este rally dependía, más que nunca, del comportamiento de cada uno.
La presión era máxima. Todos los focos del mundo del motor estaban en Gran Canaria, mirando a la organización, sí, pero también a nuestra gente, a nuestra forma de vivir el rally. Y vaya si respondimos. Desde dentro de Dirección de Carrera, donde hemos tenido el privilegio de estar, podemos decirlo bien alto: el comportamiento de la afición ha sido ejemplar.
Verlo era una auténtica maravilla. Nadie tras la cinta roja, la gente correctamente colocada en las zonas seguras, respetando a los comisarios, colaborando cuando era necesario reubicar a alguien, preguntando siempre si su sitio era correcto, e incluso aficionados ayudando a recolocar a otros para garantizar la seguridad. Eso no se improvisa. Eso es fruto del trabajo, del empeño inagotable de Germán y Karen, del liderazgo firme de Pepo Batista, y del esfuerzo inmenso de todas y cada una de las personas que forman parte de esta Organización, que lleva muchos meses trabajando para hacer esto posible. Gracias de corazón. Y también, por supuesto, por la confianza que nos han brindado las entidades públicas y privadas que han apostado por este proyecto.
La emoción nos ha acompañado en cada tramo, en cada rincón de la isla. Escuchar a los pilotos y equipos hablar maravillas de nuestras carreteras, de nuestro entorno, de nuestra gente... era un orgullo difícil de describir. Orgullo de ser canarios. Un piloto del WRC, al acabar el tramo de “La Aldea - Mogán”, no dudó en decir: “este es el mejor tramo que he corrido jamás”. Y no fue el único en alabar nuestra tierra, porque un jefe de equipo del Mundial comentó una frase que nos dejó sin palabras: “este es sin duda el mejor rally del WRC de los últimos años”. Así de claro.
¿Y qué decir de la Ceremonia de Salida? Ver esa marea humana, esa pasión desbordada pero ordenada, esa alegría respetuosa, ponía la piel de gallina y humedecía los ojos. Igual que en cada tramo cronometrado, donde la afición supo estar a la altura. Y donde pilotos, copilotos y equipos dieron un grandísimo espectáculo.
Hoy, podemos decirlo sin miedo: Canarias ha hecho historia en el WRC. Y no habría sido posible sin ti, aficionado, aficionada. Gracias por cumplir las normas, por cuidar de tu gente, por hacer de esta semana algo inolvidable. Lo hemos conseguido juntos. Y esto, créeme, no se olvida jamás.
De corazón, gracias.
La presión era máxima. Todos los focos del mundo del motor estaban en Gran Canaria, mirando a la organización, sí, pero también a nuestra gente, a nuestra forma de vivir el rally. Y vaya si respondimos. Desde dentro de Dirección de Carrera, donde hemos tenido el privilegio de estar, podemos decirlo bien alto: el comportamiento de la afición ha sido ejemplar.
Verlo era una auténtica maravilla. Nadie tras la cinta roja, la gente correctamente colocada en las zonas seguras, respetando a los comisarios, colaborando cuando era necesario reubicar a alguien, preguntando siempre si su sitio era correcto, e incluso aficionados ayudando a recolocar a otros para garantizar la seguridad. Eso no se improvisa. Eso es fruto del trabajo, del empeño inagotable de Germán y Karen, del liderazgo firme de Pepo Batista, y del esfuerzo inmenso de todas y cada una de las personas que forman parte de esta Organización, que lleva muchos meses trabajando para hacer esto posible. Gracias de corazón. Y también, por supuesto, por la confianza que nos han brindado las entidades públicas y privadas que han apostado por este proyecto.
La emoción nos ha acompañado en cada tramo, en cada rincón de la isla. Escuchar a los pilotos y equipos hablar maravillas de nuestras carreteras, de nuestro entorno, de nuestra gente... era un orgullo difícil de describir. Orgullo de ser canarios. Un piloto del WRC, al acabar el tramo de “La Aldea - Mogán”, no dudó en decir: “este es el mejor tramo que he corrido jamás”. Y no fue el único en alabar nuestra tierra, porque un jefe de equipo del Mundial comentó una frase que nos dejó sin palabras: “este es sin duda el mejor rally del WRC de los últimos años”. Así de claro.
¿Y qué decir de la Ceremonia de Salida? Ver esa marea humana, esa pasión desbordada pero ordenada, esa alegría respetuosa, ponía la piel de gallina y humedecía los ojos. Igual que en cada tramo cronometrado, donde la afición supo estar a la altura. Y donde pilotos, copilotos y equipos dieron un grandísimo espectáculo.
Hoy, podemos decirlo sin miedo: Canarias ha hecho historia en el WRC. Y no habría sido posible sin ti, aficionado, aficionada. Gracias por cumplir las normas, por cuidar de tu gente, por hacer de esta semana algo inolvidable. Lo hemos conseguido juntos. Y esto, créeme, no se olvida jamás.
De corazón, gracias.
