¿Los inviernos parecen cada año más cortos? Sólo han pasado tres meses y medio de aquel emocionante final en Sao Paulo y ya estamos aquí a punto de encarar la primera carrera de la temporada 2013. No han cambiado demasiado las cosas desde aquel mes de noviembre en Interlagos, si bien este nuevo año hay un equipo y una carrera menos, con lo que la Scuderia Ferrari y los otros diez equipos disputarán un total de diecinueve Grandes Premios.

En lo que al reglamento se refiere, el grueso de las normas es el mismo que el año pasado a excepción de algunos cambios de menor importancia, como la limitación del uso del DRS a la clasificación, mientras que en 2012 era libre. 2013 señalará el fin de una era, puesto que será la última vez, al menos de momento, que los monoplazas de Fórmula 1 lleven los motores V8, con lo que en el caso de Ferrari el propulsor 056 dirá adiós una vez que se baje el telón de la temporada.

Todo permanece estable en el frente técnico del equipo del Cavallino Rampante, con la nueva estructura organizativa trabajando sin problemas, sin cambios en los "altos mandos", y con la misma pareja de pilotos desde 2010. Entre los dos pilotos suman diez años al servicio de Ferrari, siendo ésta la cuarta temporada de Fernando Alonso en las filas del equipo de Maranello, mientras que Felipe Massa ya ha vestido el famoso mono rojo durante siete años.

Pedro de la Rosa empieza esta nueva temporada como piloto de pruebas de la escuadra. El piloto español fichó por Ferrari a mediados del pasado mes de enero y ha completado múltiples jornadas en el simulador para afrontar con las máximas garantías la primera carrera del Mundial. De la Rosa debutó en pista con el F138 el 8 de febrero en Jerez, pilotando el octavo coche de F1 en su carrera deportiva. El barcelonés volverá a estar los domingos en Antena 3 analizando las carreras en directo para los espectadores e interpretando la multitud de paradas en boxes que se van a realizar en Melbourne.

Con la estabilidad del reglamento técnico, la mayoría de los equipos han podido poner en pista un coche con el que rodar con fiabilidad durante las limitadísimas doce jornadas de entrenamientos de pretemporada, razón por la que reina la cautela a la hora de emitir juicios sobre el campeonato de 2013. Uno no debe esperar tampoco muchas respuestas de la jornada del viernes: como circuito urbano temporal, Albert Park es una pista muy "verde", con poco rodaje en los primeros entrenamientos libres, así que será el sábado por la tarde cuando los equipos dejen sus reservas acerca de lo que pueden hacer y afronten el primer examen "justo" de rendimiento. De todas formas, el circuito de Melbourne es bueno a la hora de esconder verdades. Uno de los factores que no volverá a ser un problema es el de la degradación de los neumáticos en las condiciones meteorológicas frías de Barcelona, en las dos últimas tantas de entrenamientos, más frías de lo habitual. Al otro lado del mundo, en Melbourne, va a hacer mucho más calor del que acostumbra esta época del año. Ahora mismo los termómetros rondan los treinta y cinco grados, si bien es cierto que deberían bajar hasta los veintitantos el viernes y sábado, incluso llegando a los 19 el día de la carrera. Sin embrago, la experiencia sobre los neumáticos de lluvia que se adquirió en el Circuit de Catalunya no será de utilidad este fin de semana. En lo relativo a los neumáticos, la elección para Albert Park es agresiva, súper blandos y medios.

El GP de Australia tiene la costumbre de dejar algunas sorpresas, pero uno tendría que ser muy valiente para apostar por sumar una victoria más a las siete que tiene el casillero de Ferrari en Australia, siendo la última la de Kimi Raikkonen en 2007. Fernando ganó aquí en 2006, pero no a los mandos de un coche rojo, mientas que el mejor resultado de Felipe fue el tercer escalón del podio de 2010.

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