Distinguido Sr. (Indique a quien más puede influenciar)

Como bien sabe, existe una Ley de Espectáculos Públicos, que se basa principalmente en reglar aquellos lugares de afluencia masiva de personas en sitios acotados, para los que hasta la fecha de nacimiento de esta ley, no existían una serie de normas básicas de obligados cumplimiento y que los más listillos del lugar se saltaban a la torera.

De Ud. es conocido que el deporte del motor atrae a infinidad de aficionados a los que hay que cabrear un poco más de lo que ya lo están por el devenir de la propia existencia diaria. Como son muchos los que de ellos no acuden a los estadios y se les pueda controlar, tenemos que poner puertas al campo y así tenerlos a todos ellos muy controladitos. Y que decir de los pilotos, que viene ya con todo conseguido, pues les cuesta muy poco esto de participar y solo vienen a divertirse.

Por otra parte, como presidente elegido dramáticamente (no es error del corrector, lo que pasa que una de las opciones era esta y me pareció mas correcta) y por una abultada mayoría de incautos que se han creído que después de muchos años en esto, algo tenía que haber aprendido, me permito aconsejarle que se tenga mucho cuidado en autorizar a partir de ahora todo aquello que hasta la fecha se ha venido autorizando, dado que la ley parida para una cosa bien puede ser aplicada para esta otra, aunque no tenga nada que ver.

Se que me tenía que haber estado calladito, y en lugar de formar el lio que se ha formado, haberme reunido con todas y cada una de las partes implicadas y llegar a una saludable solución, pero ya sabe Ud. que entre pasear a mi mascota y atender las prerrogativas de mi cargo me impiden reunirme con quienes, encima, me van a montar la bronca por elegir a indocumentados que hacen mal su trabajo.

No debe Ud. preocuparse de las consecuencias de todo este lio, dado que quienes montan el espectáculo, osea los pilotos, no están por la labor de decir basta y no los creo capaces de montar un numerito y no participar, ya que como están acostumbrados a que se les ignore sistemáticamente, por una chorrada más como esta no pasará nada. Ellos están ya representados por un grupito de amantes de este deporte y saben lo que tienen que hacer en todo momento.

Sin más me despido, sepa que seguiré manteniendolo informado de lo que a partir de ahora deberá solicitar a la hora de autorizar alguna que otra prueba deportiva, que para eso tengo a mi gente buscando leyes absurdas que aplicar, mas que nada, para seguir tocando los bajos de algún vehículo descontrolado. Por cierto, no haga caso a las voces que dicen que tengo los días contados, ya que tengo cuerda para rato.

Atentamente,

(No se si poner mi nombre, dado que todos ya me conocen).

PD: Para los que no sepan de que va toda esta polémica, lean Esto y Aquello.