Las armas vuelven a estar en alto en Peugeot. Tras otra demostración de Sébastien Loeb ayer, hoy ha sido el turno de Stéphane Peterhansel para brillar. Aprovechando los problemas (pinchazo y electrónica) de Sébastien Loeb, el plusmarquista de victorias en el Rally se ha impuesto y ha tomado las riendas de la general. Por su parte, a 8'15'' en la llegada a meta, Loeb abandona el liderato por 27 segundos. En la categoría de motos, se ha adjudicado la victoria Toby Price (KTM), su tercer entorchado en esta competición. Gonçalves sigue al mando de la provisional, pero Price se acerca a 35 segundos. La jornada también ha estado marcada por un número más que considerable de abandonos.
La misma experiencia de la que ha hecho gala Carlos Sainz con su segunda posición en la llegada a meta. Sin embargo, aunque los pinchazos forman parte de las vicisitudes normales de una etapa, los problemas en el acelerador de Sébastien Loeb, después de los de ayer de Despres, ya son un poco más preocupantes esta noche para Peugeot. De momento, las consecuencias son más bien limitadas, pero la reaparición de estos inconvenientes podría suponer una reactivación de la carrera antes de lo previsto. Por lo menos, eso es lo que le gustaría a Nasser Al Attiyah (Mini), relegado un día más al papel de comparsa. En la general, las diferencias se reducen de forma espectacular. Peterhansel adelanta a Loeb en 27 segundos y saca 5'55'' a Sainz. Al Attiyah (Mini) resiste mejor que peor en la cuarta posición, a 15'19''.
Así contó Loeb los problemas de la etapa: "Hemos sufrido un pinchazo en el kilómetro 100, y después el acelerador se ha bloqueado con el gas a fondo. Hemos tenido que marchar con el cortocircuito y he pisado una roca, lo que nos ha obligado a cambiar una rueda también. Ha sido todo muy complicado, pero bueno, así son las cosas. Los tres Peugeot siguen por delante en la general y estamos dominando. A nivel global, iba todo bastante bien hasta hoy, que hemos perdido mucho. El cronómetro se pone a cero y va a haber que empezar de nuevo. Eso sí, las sensaciones son buenas y el coche va bien. Sin mayores problemas".
Aunque reconociera que el dominio de Sébastien Loeb no tenía nada de extraño, habida cuenta de la fisonomía de las especiales desde el comienzo del Rallye, se podía uno imaginar que Stéphane Peterhansel se impacientaba sobremanera al verse detrás del «recién llegado». Hoy, el «Señor Dakar» ha sabido aprovechar los problemas de su ilustre compañero de equipo dominando la carrera con mano maestra. Ahora bien, achacar esta victoria sin más a los problemas sufridos por Loeb sería pecar de reduccionista. En pistas lentas y quebradizas, Peterhansel ha tirado de galones y ha demostrado su saber hacer leyendo el terreno para rubricar una segunda victoria contundente.
La misma experiencia de la que ha hecho gala Carlos Sainz con su segunda posición en la llegada a meta. Sin embargo, aunque los pinchazos forman parte de las vicisitudes normales de una etapa, los problemas en el acelerador de Sébastien Loeb, después de los de ayer de Despres, ya son un poco más preocupantes esta noche para Peugeot. De momento, las consecuencias son más bien limitadas, pero la reaparición de estos inconvenientes podría suponer una reactivación de la carrera antes de lo previsto. Por lo menos, eso es lo que le gustaría a Nasser Al Attiyah (Mini), relegado un día más al papel de comparsa. En la general, las diferencias se reducen de forma espectacular. Peterhansel adelanta a Loeb en 27 segundos y saca 5'55'' a Sainz. Al Attiyah (Mini) resiste mejor que peor en la cuarta posición, a 15'19''.
Así contó Loeb los problemas de la etapa: "Hemos sufrido un pinchazo en el kilómetro 100, y después el acelerador se ha bloqueado con el gas a fondo. Hemos tenido que marchar con el cortocircuito y he pisado una roca, lo que nos ha obligado a cambiar una rueda también. Ha sido todo muy complicado, pero bueno, así son las cosas. Los tres Peugeot siguen por delante en la general y estamos dominando. A nivel global, iba todo bastante bien hasta hoy, que hemos perdido mucho. El cronómetro se pone a cero y va a haber que empezar de nuevo. Eso sí, las sensaciones son buenas y el coche va bien. Sin mayores problemas".
Por lo que respecta a las motos, Toby Price, vencedor ayer de la primera etapa maratón, se ha embolsado una nueva etapa en el día de hoy. Tras acumular casi 2 minutos de retraso en el CP3, se ha impuesto finalmente con 1'12'' de ventaja sobre el piloto oficial de Honda, Gonçalves. Este último, pese a firmar un buen arranque, no ha podido hacer nada para contener la maniobra ganadora de recuperación de su rival, pero conserva el liderato de la general por 35 segundos. Walkner, tan discreto como eficaz, se sitúa ahora tercero a 2'50''. La etapa ha estado marcada por un impresionante número de abandonos, entre los que destaca el de Ruben Faria (Husqvarna), con una fractura de muñeca. En cuanto a Barreda, su hunde en lo más hondo de la clasificación después de sufrir los mismos problemas mecánicos una y otra vez.