Los tinerfeños Marco Lorenzo y Néstor Gómez vivieron un Rallye Villa de Granadilla de una manera especial. En esa nueva cita de los certámenes tinerfeños de la especialidad se iban a despedir del Mitsubishi Lancer Evo IX que tantas satisfacciones les ha proporcionado durante las últimas temporadas. Con ese detalle en la mente debían cubrir un rallye duro, con 100 kilómetros cronometrados, especiales nocturnas y dos días de competición.

Con todo, Lorenzo-Gómez comenzaron con algo de mala fortuna, al soltarse un manguito del turbo en los primeros compases del viernes. Los de ML Racing pudieron solventar el inconveniente y acabaron esa primera etapa en el top five, sobre el papel, la posición a la que podían aspirar teniendo en cuenta la potencia de los rivales que tenían por arriba.

Ya el sábado, nadando y guardando la ropa, los de Siam Park demostraron su potencial logrando cronos, en ocasiones, entre los cuatro más rápidos del día. Eso les permitía amarrar con seguridad la quinta posición, algo que acabaron logrando para seguir en la línea de los puntos.

"Ha sido un rallye emotivo para nosotros porque nos despedimos del coche que más tiempo nos ha acompañado", dijo Marco Lorenzo al finalizar la edición número 28 del Rallye Villa de Granadilla. "En lo deportivo, creo que hemos acabado donde nos tocaba, por potencia es imposible medirse con los GT, R5 o N5, así que estamos satisfechos", reconoció. "Era importante sumar puntos, como ya hicimos en el pasado "Villa de Adeje", y ahora veremos qué pasa en el futuro", avanza el tinerfeño, que asegura que lleva tiempo deseando "dar un salto".

Este proyecto es posible gracias al apoyo de Siam Park, Mesón Castellano, Playa de Las Américas " Arona Tenerife Sur, Coral Hotels, Dialprix, Tamarán, Spacio10, TAZ, El Duque Aparthotel, Fred Olsen, Camiones Teide Sur, Acuario Poema del Mar y Fundación Loro Parque.