Tras haber descartado su participación en la anterior prueba de El Hierro, Luis Monzón llega en segundo lugar de la provisional del Campeonato Disa de Canarias de Montaña antes del sexto y último "round" del año. La XV Subida Villa de Moya que se celebra este próximo sábado 12 de octubre va a decidir el nombre del campeón de Turismos y aunque acabar entre los cinco primeros es suficiente para asegurarse el tercer título consecutivo con el Audi R8 LMS y el que sería el quinto regional de montaña de su dilatada carrera deportiva, no va a ser en absoluto fácil.
Con más de siete kilómetros, Moya plantea un recorrido repleto de trampas para el potente GT de Auto-Laca. El propio piloto sabe cómo se las gasta este tramo incluso a los mandos de un coche de rallies. "Es una prueba muy complicada a todos los niveles. Sí, es rápida, pero a la vez tiene muchos cambios de "grip", aunque a primera vista el asfalto no dé esa impresión. Al mismo tiempo, hay que tener cuidado con las raíces y también con las zonas de arboleda porque puede haber humedades que se queden ahí durante todo el día. Son muchos factores y muchas trampas, así que tengo muchas dudas sobre cómo puede ir el R8. Es un coche muy rápido, pero en Moya hay zonas muy críticas para él".
Además, a Monzón le inquieta el tiempo que lleva inactivo. Sus estadísticas con el R8 LMS con los colores de Auto-Laca y Lopesan son demoledoras, ya que lleva tres temporadas invicto y con numerosos records, pero su último triunfo se produjo en el lejano ya mes de junio en La Palma. "Me preocupa porque en Moya hay que trabajar mucho con el volante, necesitas mucho "feeling" y quizá me cueste alcanzar ese punto de confianza que va a hacer falta en las primeras mangas. Sobre todo comparado con mi rival, Enrique Cruz, que llega en forma y por delante de mí en la provisional".
De cara a la elaboración de la clasificación final se ha de descartar un resultado, por lo que, con cuatro triunfos en cinco pruebas disputadas, Monzón cuenta con una ventaja que espera no tener que hacer valer en su isla. "Por supuesto que tanto a Auto-Laca como a mí nos gustaría rematar este tercer título consecutivo con otra victoria, pero la competencia va a ser máxima esta vez. Vamos a tener que darlo todo". Respecto al R8 LMS, los técnicos de Auto-Laca van a partir de la misma configuración de las últimas pruebas salvo en detalles como las presiones de neumáticos y algún ajuste que consideren oportuno realizar durante el transcurso de esta prueba.
La prueba, que cuenta con cerca de un centenar de inscritos y es puntuable también para el provincial de Las Palmas de Montaña, arrancará desde las 9:30 de la mañana, hora en que está previsto que se dispute la manga de entrenamientos previa a las dos oficiales.
Con más de siete kilómetros, Moya plantea un recorrido repleto de trampas para el potente GT de Auto-Laca. El propio piloto sabe cómo se las gasta este tramo incluso a los mandos de un coche de rallies. "Es una prueba muy complicada a todos los niveles. Sí, es rápida, pero a la vez tiene muchos cambios de "grip", aunque a primera vista el asfalto no dé esa impresión. Al mismo tiempo, hay que tener cuidado con las raíces y también con las zonas de arboleda porque puede haber humedades que se queden ahí durante todo el día. Son muchos factores y muchas trampas, así que tengo muchas dudas sobre cómo puede ir el R8. Es un coche muy rápido, pero en Moya hay zonas muy críticas para él".
Además, a Monzón le inquieta el tiempo que lleva inactivo. Sus estadísticas con el R8 LMS con los colores de Auto-Laca y Lopesan son demoledoras, ya que lleva tres temporadas invicto y con numerosos records, pero su último triunfo se produjo en el lejano ya mes de junio en La Palma. "Me preocupa porque en Moya hay que trabajar mucho con el volante, necesitas mucho "feeling" y quizá me cueste alcanzar ese punto de confianza que va a hacer falta en las primeras mangas. Sobre todo comparado con mi rival, Enrique Cruz, que llega en forma y por delante de mí en la provisional".
De cara a la elaboración de la clasificación final se ha de descartar un resultado, por lo que, con cuatro triunfos en cinco pruebas disputadas, Monzón cuenta con una ventaja que espera no tener que hacer valer en su isla. "Por supuesto que tanto a Auto-Laca como a mí nos gustaría rematar este tercer título consecutivo con otra victoria, pero la competencia va a ser máxima esta vez. Vamos a tener que darlo todo". Respecto al R8 LMS, los técnicos de Auto-Laca van a partir de la misma configuración de las últimas pruebas salvo en detalles como las presiones de neumáticos y algún ajuste que consideren oportuno realizar durante el transcurso de esta prueba.
La prueba, que cuenta con cerca de un centenar de inscritos y es puntuable también para el provincial de Las Palmas de Montaña, arrancará desde las 9:30 de la mañana, hora en que está previsto que se dispute la manga de entrenamientos previa a las dos oficiales.
