Isidre Esteve suma ya cinco ediciones del Dakar completadas en coche. El piloto del Repsol Rally Team se ha mostrado muy competitivo en una exigente edición que ha destacado por su elevado nivel de participación. Tras completar la última etapa de este viernes en 29ª posición, el ilerdense ha finalizado en el 28º lugar de la general, con su Toyota Hilux Overdrive.
La última noche en el campamento ha resultado la más larga para los mecánicos del Repsol Rally Team, David Pigem, Carlos Méndez y Albert Soler que han trabajado muy duro para reparar el diferencial delantero del vehículo, tras el problema que sufrió ayer a escasos 20 kilómetros de meta, el único de toda la carrera. “Junto a los técnicos de Overdrive, han realizado un gran esfuerzo para que el coche volviera a estar hoy perfecto”, les agradecía Isidre Esteve.
La última jornada constaba de 227 kilómetros de enlace y 225 de lucha contra el reloj. Isidre Esteve y Txema Villalobos partían retrasados desde el puesto 44, aunque han rodado a buen ritmo para remontar posiciones y finalizar en el 29º lugar, con un tiempo de 2h 52" 38"". Y eso que nada más iniciar, han decidido detenerse para auxiliar a un buggy accidentado.
“Llevábamos tres kilómetros cuando hemos visto un accidente justo delante nuestro y nos hemos parado para ayudarles. En seguida han llegado otros buggys y hemos podido continuar para disfrutar de una etapa bonita, muy variada, con dunas blancas bastante complicadas. Hemos disfrutado de un buen final de Dakar”, explicaba el piloto de Repsol, MGS Seguros, KH-7 y Toyota España.
En la clasificación general, Isidre Esteve ha acabado 28º con un tiempo acumulado de 54h 51" 18"". De no ser por las casi dos horas perdidas ayer por el inesperado contratiempo, el Repsol Rally Team hubiera igualado el 21º lugar que tiene como mejor resultado, conseguido en 2018 y 2019. Aun así el piloto de Oliana otorga un gran valor al papel realizado este año por su equipo.
“Ha sido la edición con más competitividad de las seis que he disputado en coche y nuestro resultado tiene un mérito enorme. Había muchos pilotos rápidos y muy pocos han tenido problemas mecánicos. Este año ha subido muchísimo el nivel en general y ha habido más profesionalización. Estoy satisfecho porque nosotros también hemos dado un importante paso adelante y hemos sido más competitivos que nunca”, resumía Isidre Esteve.
Por todo ello, se muestra “contento de haber acabado y de no haber cometido ningún error grave. Todo el equipo ha realizado una gran labor en una edición muy exigente, especialmente por las zonas de piedra, donde nos ha costado encontrar el ritmo para no pinchar. Después de una buena primera semana, la segunda ha sido más complicada para nosotros y tuvimos la mala suerte de bloquear el diferencial, lo que nos ha acabado penalizando demasiado”.
Isidre Esteve agradece el apoyo recibido por todas las personas implicadas en el proyecto del Repsol Rally Team: “Gracias a ellos hemos podido disfrutar del mejor coche que he pilotado nunca. Este Dakar nos ha permitido detectar aquellos aspectos que debemos mejorar para seguir creciendo de cara al futuro. Ya tenemos ganas de volver el año que viene para ser todavía más competitivos”.
La última noche en el campamento ha resultado la más larga para los mecánicos del Repsol Rally Team, David Pigem, Carlos Méndez y Albert Soler que han trabajado muy duro para reparar el diferencial delantero del vehículo, tras el problema que sufrió ayer a escasos 20 kilómetros de meta, el único de toda la carrera. “Junto a los técnicos de Overdrive, han realizado un gran esfuerzo para que el coche volviera a estar hoy perfecto”, les agradecía Isidre Esteve.
La última jornada constaba de 227 kilómetros de enlace y 225 de lucha contra el reloj. Isidre Esteve y Txema Villalobos partían retrasados desde el puesto 44, aunque han rodado a buen ritmo para remontar posiciones y finalizar en el 29º lugar, con un tiempo de 2h 52" 38"". Y eso que nada más iniciar, han decidido detenerse para auxiliar a un buggy accidentado.
“Llevábamos tres kilómetros cuando hemos visto un accidente justo delante nuestro y nos hemos parado para ayudarles. En seguida han llegado otros buggys y hemos podido continuar para disfrutar de una etapa bonita, muy variada, con dunas blancas bastante complicadas. Hemos disfrutado de un buen final de Dakar”, explicaba el piloto de Repsol, MGS Seguros, KH-7 y Toyota España.
En la clasificación general, Isidre Esteve ha acabado 28º con un tiempo acumulado de 54h 51" 18"". De no ser por las casi dos horas perdidas ayer por el inesperado contratiempo, el Repsol Rally Team hubiera igualado el 21º lugar que tiene como mejor resultado, conseguido en 2018 y 2019. Aun así el piloto de Oliana otorga un gran valor al papel realizado este año por su equipo.
“Ha sido la edición con más competitividad de las seis que he disputado en coche y nuestro resultado tiene un mérito enorme. Había muchos pilotos rápidos y muy pocos han tenido problemas mecánicos. Este año ha subido muchísimo el nivel en general y ha habido más profesionalización. Estoy satisfecho porque nosotros también hemos dado un importante paso adelante y hemos sido más competitivos que nunca”, resumía Isidre Esteve.
Por todo ello, se muestra “contento de haber acabado y de no haber cometido ningún error grave. Todo el equipo ha realizado una gran labor en una edición muy exigente, especialmente por las zonas de piedra, donde nos ha costado encontrar el ritmo para no pinchar. Después de una buena primera semana, la segunda ha sido más complicada para nosotros y tuvimos la mala suerte de bloquear el diferencial, lo que nos ha acabado penalizando demasiado”.
Isidre Esteve agradece el apoyo recibido por todas las personas implicadas en el proyecto del Repsol Rally Team: “Gracias a ellos hemos podido disfrutar del mejor coche que he pilotado nunca. Este Dakar nos ha permitido detectar aquellos aspectos que debemos mejorar para seguir creciendo de cara al futuro. Ya tenemos ganas de volver el año que viene para ser todavía más competitivos”.