1.- ¿Añoras aquellos años del resurgir de nuestro automovilismo?

Indudablemente sí, eran otros tiempos donde un objetivo común nos tenía todo el colectivo unidos como una piña, una amistad tan fuerte que incluso trascendía a la amistad entre nuestras familias, reuniéndonos todos en la sede de la Escudería e incluso haciendo excursiones, asaderos... nada que ver con esa especie de odio tribal que se respira ahora, incluso entre pilotos de la misma especialidad.

2.- ¿De usar papel de calcar a ordenador, no te quedarias con lo primero hoy día?

No, no, de ninguna manera. En esto si que "cualquier tiempo pasado no fue mejor", eran fórmulas casi heroicas que hoy día con la informática están superadas, e incluso olvidadas, y si se recuerdan es a modo de anécdota, como hacemos en este momento. Había menos pruebas que ahora, el promedio era algo así como de una carrera por mes. Yo acudía a los cierres de inscripciones y a la prueba de turno con mi máquina de escribir portátil "Olympia" y de carro grande para poder meter los folios apaisados, folios de "papel cebolla" que admitían hasta diez hojas de papel carbón para sacar de una vez otras tantas copias que eran suficientes para el organizador, la Federación y los dos o tres medios informativos que entonces acudíamos a las pruebas. En las subidas utilizaba mi propio método para elaborar la clasificación, muy sencillo y elemental: una cartulina por participante en la que se iban anotando los tiempos, y en la última manga ya se iban ordenando, de modo que al pasar el último coche por meta ya estaba la clasificación lista.

Este método lo copié del recordado doctor Luis Carrasco, presidente de la Federación Tinerfeña, aunque él tenía la ventaja de una multicopista. La hoja de clasificación, o el documento que fuera, se escribía sobre un papel especial a modo de cliché, éste se insertaba en la citada multicopista y a mano, mediante una manivela, salían copias como churros, unas 50 ó 60, que era lo que duraba el cliché sin deteriorarse.

3.- ¿Cuentanos algo de aquellos años como presidente de la Drago?

Muchísimos recuerdos se diluyen en el tiempo, estamos hablando de hace cuarenta años, precisamente el 24 de junio de 2011 se cumplirá el 40º aniversario de la Fundación de la Escudería Drago. Ese día cuarenta socios fundadores firmamos el acta fundacional en el Restaurante de la Piscina Julio Navarro, y como -modestia aparte- había sido el iniciador e impulsor de la idea, me endosaron la presidencia y a Hilario Gómez la vicepresidencia, porque también había empujado lo suyo. Tuvimos una lucha de casi un año para convencer a las autoridades de que nos permitieran reanudar las competiciones que llevaban más de cuatro años suspendidas por orden gubernamental, y no me quisiera olvidar del gran papel que también jugaron en esa tarea gentes como Manuel de Aguilar, Pepín Ortega, Juan Alfonso Rodríguez, Miguel Ángel Toledo, José Luis Marrero, Eugenio Montoro q.e.p.d. José Manuel Correas....

Estuve dos años de presidente, organizando casi una prueba por mes, organizando, buscando los trofeos, haciendo los comunicados de prensa y repartiéndolos a domicilio -el fax aún no se había inventado- reuniones casi a diario... hasta que en mi trabajo me platearon que eligiera: la escudería o mi puesto laboral. Evidentemente no tenía otra opción, dejé la presidencia, aunque seguí colaborando en temas puntuales y todo lo que podía, por ejemplo en la creación del Rallye de Maspalomas y en la búsqueda de colaboradores para que se ocuparan del automovilismo deportivo en los medios más importantes.

4.- ¿Qué cambiarias ahora de algunos de los asuntos que en su momento te tocaron decidir?

Cada uno es hijo de sus actos, y las decisiones que se toman en su momento hay que asumirlas y no pensar "en lo que podría haber sido y no fue". Si puedo decir que me dolió mucho una decisión, no mía sino colectiva, por lo que se votó en la Escudería Drago que la internacionalidad y Campeonato de Europa del Rallye de Maspalomas se traspasaran al Rallye El Corte Inglés; nos opusimos varios, pero fueron más los que vendieron los laureles al gran almacén. Para mi fue una gran frustración deportiva y sentimental, aunque a esas alturas ya no tenía nada que ver con la organización del rallye.

5.- ¿De tu época como copiloto, cual es el mejor recuerdo?

Sin duda haber ganado el "Rallye Seat 127" en Tenerife con más cincuenta coches del mismo modelo y más o menos parecidos, compitiendo además los pilotos más conocidos de la época. Recuerdo que el Rallye era en domingo por la mañana, y el sábado por la tarde probando el coche en la Subida de Güímar se desintegró el motor. Tuvimos que buscar uno de alquiler para pasar piezas y otras buscarlas a través del agente de Seat en Güímar, que estaba en misa y tuve casi que arrastrarlo fuera de la iglesia. Medardo se fue a dormir y los mecánicos se quedaron en el exterior del Mirador de Don Martín, que tenía un buen alumbrado, reparando y poniendo a punto el injerto casi sin herramientas.

Al día, siguiente, el primer tramo era precisamente Güímar, y nos metió el primero nada menos que 8 segundos y terminamos por el puesto vigésimo o algo así. Medardo quería abandonar de inmediato, le convencí, y segundo a segundo, excepto en Tamaimo que fueron 5 ó 6, fuimos remontando hasta terminar ganando el rallye por 10 segundos. Fue algo increíble e inolvidable. De los trofeos que conservo éste es para mi el más especial.

6.- ¿Y el peor?

Curiosamente también en Tenerife, el accidente que tuvimos en el Rallye Ciudad de Santa Cruz -Campeonato de España- el 26 de junio de 1986. Fue en la "Cuesta de Las Tablas", unas enlazadas derecha-izquierda, afortunadamente lentas, el Lancia 37 se descolocó en la primera y se empotró por mi lado contra un enorme risco. Tuve fracturas en las dos piernas, casi tres meses en silla de ruedas y más de un año con muletas, pero lo que más me dolió es que en el tramo anterior había abandonado Carlos Sainz con el Renault Maxi 5 Turbo y estábamos liderando el rallye por delante de Antonio Zanini con el Ford RS 2000 y demás equipos que seguían el nacional de rallies.
Después me desquité, y aún con la pierna derecha enyesada desde la ingle hasta el mismo pie, participé en los rallies de Teror e Isla de Lanzarote. Me tenían que meter y sacar del coche entre varias personas. Locuras que se hacen y que hoy si que son inconcebibles.

7.- ¿Ha perdido glamour y camaraderia el automovilismo?

Totalmente, de uno y de lo otro. No creo necesario entrar en más detalles porque es algo sumamente triste.

8.- ¿Qué cosas quitarias del automovilismo actual?

Las envidias, los malos modos, el ansia de controlar los pocos aspectos económicos que aún quedan. Pero por encima de todo, reduciría los calendarios a la mitad o menos. Sobran pruebas y falta economía para soportarlas, tanto entre los organizadores como entre los participantes.

9.- ¿Falta imaginación a la hora de hacer cosas atrayentes?

Totalmente, no se ven iniciativas nuevas. Estamos desde hace treinta años en el "sota caballo y rey". Unos estamentos porque son amateurs y otros porque su profesionalización les lleva a contemplar su cuenta de resultados, van a lo sencillo y barato. Hace poco vimos una pequeña iniciativa que tuvo un gran éxito, fue el de sumar un Rallye-Fórmula al último Slalom del Regional. No sé si faltan ganas o ideas, o faltan ambas cosas a la vez.

10.- ¿Con que piloto canario te quedas a la hora de hacer historia?

Sin duda Yeray Lemes, por su juventud y maneras tiene mucho que hacer aún, si es que se rodea de los medios económicos imprescindibles. También los ha habido muy buenos, pero ya se les ha pasado el arroz.

11.- ¿Ha sido el principio del fin de este deporte la desaparición de la publicidad de las tabaqueras?

... las tabaqueras, las telefónicas, los refrescos... nos quedan -o quedaban- las instituciones, pero después de la tremenda crisis que arrastramos a todos los niveles, nos vamos a ver como hace 40 años, sobreviviendo con las inscripciones y poquito más.

12.- ¿Tras tantos años haciendo información en papel cada quince días a lo inmediato de Internet, como ha sido el cambio?

Ha sido un salto abismal en todos los aspectos: reducción de personal, inmediatez total, espacio ilimitado para textos, fotos, vídeos, difusión universal, interactividad. No tiene nada que ver. Internet es el futuro de la prensa como vemos en los Estados Unidos, lo que ocurre es que allí están muy avanzados y no les importa pagar por acceder a la información a través de una web; esto aquí es impensable de momento y el único soporte económico es el de la publicidad.

13.- ¿Satisfecho con el cambio de formato de Motor 2000?

Mil por cien. Esto no quiere decir que guarde un excepcional recuerdo de ese periodismo "golpe a golpe" con un gran equipo de redacción, de diseño y maquetación, de las imprentas que han colaborado con nosotros y lo que se han sacrificado para salir con máxima puntualidad en la fecha de portada. Pero como la vida misma, todo consta de etapas, y más los avances
tecnológicos.

14.- ¿Y de la actual crisis, ves luz al final del túnel?

Si se valora por la situación política, tanto nacional como regional, esa luz es apenas un puntito luminoso en la distancia. Se podrá ir agrandando, pero tampoco podría extrañar que se produjera un apagón total.

15.- ¿Cual sería tu medicina inmediata en epocas como éstas?

Austeridad y unión... unión y austeridad... y así hasta el infinito. Centrándonos en lo deportivo, reducción drástica de los calendarios, incluyendo pruebas nacionales e internacionales que no aportan prácticamente nada y se llevan "la parte del león" en los presupuestos.

16.- ¿Cual es tu deseo para el 2011?

Que se produzca la concordia entre todas las familias del automovilismo canario, que se busque el fortalecimiento a través de la unión y las sinergias con la base de un objetivo global único, sin personalismos ni resquemores. En definitiva, aplicar aquello tan básico de "la unión hace la fuerza".