La labor del copiloto en el Rally Dakar es, como mínimo, tan importante como la del piloto que lleva el volante. El ‘navegante’, como también se le denomina en el rally, es el encargado de interpretar el siempre difícil ‘roadbook (libro de ruta)’ y de indicar al piloto el rumbo que ha de seguir. El más mínimo error a la hora de leerlo, puede provocar una enorme pérdida de tiempo y, por tanto, una caída en la clasificación que condicionará el resultado final de la carrera. O, peor aún, puede llevar a tomar el camino incorrecto y acabar cayendo en alguna ‘trampa’ del recorrido.
Por ello, tanto la experiencia del copiloto como el buen entendimiento de éste con el piloto, son claves para conseguir un buen resultado en el Rally Dakar. Sin estos ‘ingredientes’, alcanzar la meta tras un recorrido de más de 8.000 kilómetros sería imposible, y por ello el Astara Team cuenta con tres copilotos de calidad probada, como Maurizio Gerini (copiloto de Laia Sanz), Marc Solà (copiloto de Carlos Checa) y Diego Vallejo, que se sienta a la derecha de Óscar Fuertes.
El gallego afronta su séptimo Dakar este año y, el quinto a la derecha de Fuertes. La dupla guarda muy buena relación desde sus inicios, allá por el año 2015, y se ha confirmado como una de las más fiables y constantes del rally. No en vano, han finalizado todas sus participaciones juntos. En el desierto, aseguran, se han contado “secretos inconfesables”, y durante el Dakar 2023 seguirán sumando aventuras.
Vallejo apuesta por un Dakar muy exigente
No habrá tiempo para la relajación desde el inicio del rally con la etapa prólogo del día 31 de diciembre. A pesar de que tan solo sean 11 kilómetros contra el cronómetro, los equipos tratarán de acabar tan arriba como sea posible, pues de esta forma evitarán salir entre vehículos más lentos.
“Acabar delante es la única forma de evitar estar entre camiones y otros coches más lentos, lo que dificultaría remontar, sobre todo por el polvo y porque el suelo se rompe”, explica Vallejo, que al mismo tiempo nos descubre una novedad: por primera vez, este año, se podrá realizar un reconocimiento del recorrido de la etapa prólogo a pie o a bicicleta... y, aunque no se podrán hacer anotaciones, se podrán hacer una ligera idea de lo que se van a encontrar al día siguiente.
Después, habrá que cambiar el ‘chip’ y afrontar la carrera paso a paso, como la auténtica prueba de resistencia que es. Aunque la organización apenas proporciona a los copilotos unos detalles sobre el recorrido, como el lugar de inicio y final de la etapa, así como los horarios de salida y límite de llegada, Vallejo ya se hace una idea de cuáles serán las etapas más difíciles. “Creo que la primera semana va a ser dura, porque las etapas tienen muchos kilómetros y en el recorrido se espera que haya muchas piedras. Viendo los horarios, ya te puedes hacer una idea de que van a ser días duros: hay jornadas en las que se espera que el último piloto llegue a las seis de la mañana, y en otros también indican las doce de la noche... “, comenta.
Después de la etapa de descanso, la dinámica cambia, pero la dureza no se reduce: “Tendremos menos kilómetros por día, pero porque entramos en el ‘Empty Quarter’, donde solo hay dunas, con etapas de alrededor de 200 kilómetros. Vamos a tener mucha arena y tardaremos el triple en hacer cada kilómetro, porque la velocidad es muy baja. A eso hay que añadir que tanto la mecánica como pilotos y copilotos llegaremos muy tocados”.
Uno de los puntos a destacar del recorrido del Dakar 2023 es la entrada en el ‘Empty Quarter’, el desierto absoluto, donde los participantes tendrá que navegar entre dunas. Este será uno de los grandes desafíos para los copilotos, porque “es como estar en el mar”, a diferencia de la pista, que es más parecido a competir en un rally. El gallego también confía plenamente en su piloto, Fuertes, “que se desenvuelve muy bien tanto en las dunas como en la pista”.
Precisamente por esta dureza del recorrido, que puede dejar fuera de juego a muchos participantes, Vallejo piensa que será un Dakar muy táctico, donde habrá que “saber nadar y guardar la ropa”, sin ser especialmente agresivo durante cada jornada.
Es un orgullo formar parte del Astara Team 2023
Diego Vallejo ha formado parte del Astara Team desde el primer día, como copiloto de Óscar Fuertes, y ha visto desde dentro el crecimiento de un equipo que este año contará con más de 30 personas desplazadas en Arabia Saudí y tres coches. Para Vallejo, “es un orgullo formar parte de esta estructura. Es una gozada estar con grandes pilotos, incluidos campeones del mundo, y con súper expertos”, asegura.
Además, este Dakar será especial para Diego por otros motivos personales, puesto que su hermano, el campeón nacional de rallyes, Sergio Vallejo, debuta en el rally. “Estoy muy contento, será muy especial. Ya había venido varias veces para vivirlo desde dentro, pero este año por primera vez va a competir. Estoy muy orgulloso, ¡seremos dos Vallejo en el Dakar!”.
Por ello, tanto la experiencia del copiloto como el buen entendimiento de éste con el piloto, son claves para conseguir un buen resultado en el Rally Dakar. Sin estos ‘ingredientes’, alcanzar la meta tras un recorrido de más de 8.000 kilómetros sería imposible, y por ello el Astara Team cuenta con tres copilotos de calidad probada, como Maurizio Gerini (copiloto de Laia Sanz), Marc Solà (copiloto de Carlos Checa) y Diego Vallejo, que se sienta a la derecha de Óscar Fuertes.
El gallego afronta su séptimo Dakar este año y, el quinto a la derecha de Fuertes. La dupla guarda muy buena relación desde sus inicios, allá por el año 2015, y se ha confirmado como una de las más fiables y constantes del rally. No en vano, han finalizado todas sus participaciones juntos. En el desierto, aseguran, se han contado “secretos inconfesables”, y durante el Dakar 2023 seguirán sumando aventuras.
Vallejo apuesta por un Dakar muy exigente
No habrá tiempo para la relajación desde el inicio del rally con la etapa prólogo del día 31 de diciembre. A pesar de que tan solo sean 11 kilómetros contra el cronómetro, los equipos tratarán de acabar tan arriba como sea posible, pues de esta forma evitarán salir entre vehículos más lentos.
“Acabar delante es la única forma de evitar estar entre camiones y otros coches más lentos, lo que dificultaría remontar, sobre todo por el polvo y porque el suelo se rompe”, explica Vallejo, que al mismo tiempo nos descubre una novedad: por primera vez, este año, se podrá realizar un reconocimiento del recorrido de la etapa prólogo a pie o a bicicleta... y, aunque no se podrán hacer anotaciones, se podrán hacer una ligera idea de lo que se van a encontrar al día siguiente.
Después, habrá que cambiar el ‘chip’ y afrontar la carrera paso a paso, como la auténtica prueba de resistencia que es. Aunque la organización apenas proporciona a los copilotos unos detalles sobre el recorrido, como el lugar de inicio y final de la etapa, así como los horarios de salida y límite de llegada, Vallejo ya se hace una idea de cuáles serán las etapas más difíciles. “Creo que la primera semana va a ser dura, porque las etapas tienen muchos kilómetros y en el recorrido se espera que haya muchas piedras. Viendo los horarios, ya te puedes hacer una idea de que van a ser días duros: hay jornadas en las que se espera que el último piloto llegue a las seis de la mañana, y en otros también indican las doce de la noche... “, comenta.
Después de la etapa de descanso, la dinámica cambia, pero la dureza no se reduce: “Tendremos menos kilómetros por día, pero porque entramos en el ‘Empty Quarter’, donde solo hay dunas, con etapas de alrededor de 200 kilómetros. Vamos a tener mucha arena y tardaremos el triple en hacer cada kilómetro, porque la velocidad es muy baja. A eso hay que añadir que tanto la mecánica como pilotos y copilotos llegaremos muy tocados”.
Uno de los puntos a destacar del recorrido del Dakar 2023 es la entrada en el ‘Empty Quarter’, el desierto absoluto, donde los participantes tendrá que navegar entre dunas. Este será uno de los grandes desafíos para los copilotos, porque “es como estar en el mar”, a diferencia de la pista, que es más parecido a competir en un rally. El gallego también confía plenamente en su piloto, Fuertes, “que se desenvuelve muy bien tanto en las dunas como en la pista”.
Precisamente por esta dureza del recorrido, que puede dejar fuera de juego a muchos participantes, Vallejo piensa que será un Dakar muy táctico, donde habrá que “saber nadar y guardar la ropa”, sin ser especialmente agresivo durante cada jornada.
Es un orgullo formar parte del Astara Team 2023
Diego Vallejo ha formado parte del Astara Team desde el primer día, como copiloto de Óscar Fuertes, y ha visto desde dentro el crecimiento de un equipo que este año contará con más de 30 personas desplazadas en Arabia Saudí y tres coches. Para Vallejo, “es un orgullo formar parte de esta estructura. Es una gozada estar con grandes pilotos, incluidos campeones del mundo, y con súper expertos”, asegura.
Además, este Dakar será especial para Diego por otros motivos personales, puesto que su hermano, el campeón nacional de rallyes, Sergio Vallejo, debuta en el rally. “Estoy muy contento, será muy especial. Ya había venido varias veces para vivirlo desde dentro, pero este año por primera vez va a competir. Estoy muy orgulloso, ¡seremos dos Vallejo en el Dakar!”.