Nueva vuelta de tuerca. En enero de 2022, Audi llegó al Dakar con una tecnología innovadora que incorporaba una motorización eléctrica en cada uno de los tres RS Q e-tron inscritos en carrera, con muchas más interrogantes que certezas. Cuatro victorias de etapa más tarde, pero aún lejos de la pugna por los puestos de honor en la general, el fabricante alemán se puso manos a la obra para sacar una versión mejorada del coche, que hizo su aparición estelar en el Rallye du Maroc. Con un RS Q e-tron E2 que responde a la reglamentación técnica de 2023, Stéphane Peterhansel, Carlos Sainz y Mattias Ekström participaron en la categoría Open, no sufrieron ninguna parada en pista y tuvieron un rendimiento a la altura de sus grandes rivales. Bien cargaditos de vatios y de confianza, ¿podrá el trío de estrellas de la marca de los anillos superar a los actuales líderes de la disciplina? La amenaza ha llevado a las escuderías Toyota y BRX a mover ficha, alineando a sus grandes bazas de la temporada 2022 para hacer frente a este nuevo reto.
Nasser Al Attiyah, desde el estatus que brindan cuatro victorias en el Dakar y tras poner el broche a la temporada con un título de campeón del mundo, confía en la superioridad del Toyota Hilux en su versión T1+ (ruedas más grandes, mayor amplitud de movimiento, etc.). Sus compañeros de equipo de Overdrive, tanto el saudí Yazeed Al Rajhi (3º en el Dakar y el W2RC) como los sudafricanos Giniel de Villiers y Henk Lategan, pilotarán el mismo coche, cuya potencia ha sido limitada para garantizar un mayor equilibrio entre las distintas clases (ver recuadro más abajo). El Hunter desarrollado por la escudería ProDrive estará también sujeto a estas restricciones, pero ha dado muestras de un nivel que le permite aspirar al trono tras dos semanas de competición. Si bien Sébastien Loeb no logró imponerse a Nasser Al Attiyah en la carretera hacia Jeddah el pasado enero (2º), el francés ha peleado duro durante toda la temporada del W2RC, que ha tocado a su fin con una victoria del oriundo de Alsacia en Andalucía. Sus colegas de Hunter también se han mostrado muy solventes, con Guerlain Chicherit de vuelta a su nivel más alto al imponerse en el Rallye du Maroc, inmediatamente por delante del argentino “Orly” Terranova, que se colocó a los pies del podio del W2RC, al igual que le ocurrió en el Dakar (4º). A esta colección de T1+ se suman este año los dos ejemplares presentados por el X-raid Mini JCW Team, confiados al portento de la regularidad Jakob Przygonski (4º en 2019 y 2021) y a Sebastian Halpern (8º en 2022). Otro habitual de los puestos de honor, Martin Prokop (6º en 2019), también ha apostado por el T1+ para transformar el 4x4 Ford en el que se embarca a partir del prólogo del sábado.
Los principales beneficiarios de la estrategia de equivalencia de tecnología serán posiblemente los pilotos de los buggies de dos ruedas motrices, que sufrieron el año pasado y deberán recuperar con este cambio su nivel de juego. Century también ha encontrado interesados para sus 10 buggies CR6 inscritos por distintos equipos, entre ellos Mathieu Serradori (7º en 2022) y Brian Baragwanath bajo los colores del fabricante sudafricano, Laia Sanz y Carlos Checa bajo los colores de Astara, o los gemelos Coronel, que tampoco han sabido resistirse al encanto de la máquina. Semejantemente, los Optimus de MD Rallye podrían colarse en el Top 10 gracias a candidatos ya versados en estas altitudes, como Christian Lavieille o Pascal Thomasse. Llegó el momento de sacar partido a las nuevas oportunidades.
La equivalencia de tecnología, ¿en qué consiste?
Con miras a equiparar el rendimiento de los coches de los pilotos amateur con los de los equipos oficiales, irrumpe una nueva equivalencia de tecnología (o EOT, por sus siglas en inglés) en el Dakar para la temporada del W2RC 2023.
La FIA ha decidido reducir el rendimiento de los T1+ y los T1U de manera equivalente al disminuir su potencia en 42 CV o 30 kW y aumentar la potencia de los T1.2 (dos ruedas motrices) en torno a 20-25 CV (+ 1 mm en el recorrido de las suspensiones).
A título de ejemplo, el Hilux de 400 CV de Nasser Al Attiyah, ganador del Dakar 2022, ha perdido un 10% de su potencia.
Nasser Al Attiyah, desde el estatus que brindan cuatro victorias en el Dakar y tras poner el broche a la temporada con un título de campeón del mundo, confía en la superioridad del Toyota Hilux en su versión T1+ (ruedas más grandes, mayor amplitud de movimiento, etc.). Sus compañeros de equipo de Overdrive, tanto el saudí Yazeed Al Rajhi (3º en el Dakar y el W2RC) como los sudafricanos Giniel de Villiers y Henk Lategan, pilotarán el mismo coche, cuya potencia ha sido limitada para garantizar un mayor equilibrio entre las distintas clases (ver recuadro más abajo). El Hunter desarrollado por la escudería ProDrive estará también sujeto a estas restricciones, pero ha dado muestras de un nivel que le permite aspirar al trono tras dos semanas de competición. Si bien Sébastien Loeb no logró imponerse a Nasser Al Attiyah en la carretera hacia Jeddah el pasado enero (2º), el francés ha peleado duro durante toda la temporada del W2RC, que ha tocado a su fin con una victoria del oriundo de Alsacia en Andalucía. Sus colegas de Hunter también se han mostrado muy solventes, con Guerlain Chicherit de vuelta a su nivel más alto al imponerse en el Rallye du Maroc, inmediatamente por delante del argentino “Orly” Terranova, que se colocó a los pies del podio del W2RC, al igual que le ocurrió en el Dakar (4º). A esta colección de T1+ se suman este año los dos ejemplares presentados por el X-raid Mini JCW Team, confiados al portento de la regularidad Jakob Przygonski (4º en 2019 y 2021) y a Sebastian Halpern (8º en 2022). Otro habitual de los puestos de honor, Martin Prokop (6º en 2019), también ha apostado por el T1+ para transformar el 4x4 Ford en el que se embarca a partir del prólogo del sábado.
Los principales beneficiarios de la estrategia de equivalencia de tecnología serán posiblemente los pilotos de los buggies de dos ruedas motrices, que sufrieron el año pasado y deberán recuperar con este cambio su nivel de juego. Century también ha encontrado interesados para sus 10 buggies CR6 inscritos por distintos equipos, entre ellos Mathieu Serradori (7º en 2022) y Brian Baragwanath bajo los colores del fabricante sudafricano, Laia Sanz y Carlos Checa bajo los colores de Astara, o los gemelos Coronel, que tampoco han sabido resistirse al encanto de la máquina. Semejantemente, los Optimus de MD Rallye podrían colarse en el Top 10 gracias a candidatos ya versados en estas altitudes, como Christian Lavieille o Pascal Thomasse. Llegó el momento de sacar partido a las nuevas oportunidades.
La equivalencia de tecnología, ¿en qué consiste?
Con miras a equiparar el rendimiento de los coches de los pilotos amateur con los de los equipos oficiales, irrumpe una nueva equivalencia de tecnología (o EOT, por sus siglas en inglés) en el Dakar para la temporada del W2RC 2023.
La FIA ha decidido reducir el rendimiento de los T1+ y los T1U de manera equivalente al disminuir su potencia en 42 CV o 30 kW y aumentar la potencia de los T1.2 (dos ruedas motrices) en torno a 20-25 CV (+ 1 mm en el recorrido de las suspensiones).
A título de ejemplo, el Hilux de 400 CV de Nasser Al Attiyah, ganador del Dakar 2022, ha perdido un 10% de su potencia.